Ya es una realidad que el comercio online ha sobrepasado la compra tradicional en establecimientos físicos. En este momento, según estamos escribiendo este artículo, hay conectadas a internet 4.578.290.098 personas (puedes verlo en tiempo real pulsando aquí). Como usuarios e incluso como trabajadores, cada vez dedicamos más horas a navegar por internet, y como consecuencia de ello, cada vez es más habitual la compra online.
Respecto a los comercios online, ofrecer a los clientes de una empresa la posibilidad de adquirir productos o servicios a través de la red, es darles un valor añadido que siempre diferencia de la competencia. Hoy en día buscamos numerosa información de cualquier empresa, comercio o tienda, a través de internet: opiniones de usuarios, buscadores, redes sociales, etc. y está comprobado que si se dispone de una tienda online, también denominado e-commerce, la experiencia de usuario es mucho más satisfactoria.
Aún muchas pymes, autónomos o empresas que operan en el siglo XXI piensan: si el servicio offline de mi tienda física es bueno, ¿por qué dar el salto a internet? Un e-commerce no solo proporciona una presencia online, que ya en si mismo es importante, sino que establece una relación duradera entre cliente y marca; además, el usuario está a un solo click de comprar un producto o servicio, sin tener que desplazarse, sin tener que comparar, de una manera rápida y directa.
Respondiendo a la pregunta anterior, ¿por qué dar el salto a internet mediante una tienda online?
1.- Amplias tu mercado.
Ya no solo tienes que vender en tu municipio o localidad, también puedes hacerlo a otro nivel: regional, nacional… incluso internacional. Por ejemplo, si tienes una tienda física en Getafe (Madrid), puedes tener como mucho aproximadamente 180.000 posibles compradores. Si esa tienda la elevas a la Comunidad de Madrid en su totalidad, podrías tener aproximadamente casi 7 millones de posibles compradores… ¿No es para pensárselo?
2.- Tiene menores costes.
En una tienda física hay que pagar un local, luz, agua, y otros costes derivados de la actividad. En una tienda online, esto se limita a la compra de un dominio y al servicio de e-commerce. Solo tendrás que poner a punto tu web con una tienda online llamativa, y empezar a vender.
3.- Sin horarios, sin límites.
Una tienda online está abierta los 365 días del año ininterrumpidamente y sin horario. ¿Cuánta gente trabaja en el horario en el que tu tienda está abierta? La pregunta es clara: casi todos. Sin embargo, con una tienda o
nline cualquiera podrá comprar tus productos y servicios a cualquier hora, en cualquier momento, y desde cualquier lugar. De ahí el siguiente punto.
4.- Accesible desde cualquier dispositivo.
En esta era de consumo donde todas las empresas venden en cualquier lugar, hay que ponérselo fácil a tu posible comprador, hay que ponerle los productos en bandeja. Teniendo una tienda online, tus clientes podrán
comprar desde su teléfono móvil, tablet u ordenador. Si un cliente pasó por tu escaparate y vio un producto perfecto para él, pero al llegar a casa resulta que no dispones de una tienda online… es muy probable que ese cliente compre en la competencia, que sí está en internet.
5.- Tus competidores ya están en internet.
Tener una presencia online es algo importante, y la mayoría de empresas y comercios ya se han dado cuenta de ello. Si tu competencia está ya en la red, podrán hacerse con tu parte proporcional del mercado mientras tú piensas si lanzarte al mundo digital o no. Ahora es el momento.
6.- Si tus clientes están ya en internet… ¿por qué no estás tú?
Anteriormente un bajo porcentaje de clientes compraba en internet, por miedo o por cualquier otra cuestión. Esto ha cambiado en la actualidad, ya que se ofrecen servicios de garantía por las propias empresas y comercios, y por entidades bancarias. Actualmente, es el 80% las personas de España que se suman al comercio online cada día, comprando productos y servicio de muy diversa índole: vacaciones, alimentos, productos tecnológicos, papelería, etc.
7.- Puedes lanzarte a la conquista de nuevos clientes.
Si tu negocio antes de la revolución de internet se limitaba a una circunscripción de barrio, ciudad o provincia, ahora esos límites los rompes tú. Puedes vender a cualquier parte del mundo. Además, tener una tienda online otorga a tu empresa una mejor valoración por tus clientes, que entenderán has dado el paso al siglo XXI.
8.- Puedes conocer mejor a tus clientes,
y ofrecerles productos personalizados según sus gustos e intereses. Gracias a la analítica web se conocen muchos más detalles sobre clientes, y cuanto más sepas sobre ellos, mejor cubrirás sus necesidades. Estableciendo un patrón de búsquedas, por ejemplo, si a un cliente le gustan las camisetas deportivas, podrás ofrecerle también desde tu tienda online otro tipo de prendas de deporte… Todo es empezar a vender en internet.
9.- Es un gran escaparate para tu marca: promociónate.
No hay mejor escaparate que estar presente en la red. Cualquier persona actualmente tiene acceso a internet desde cualquier dispositivo, y hay que sacar provecho de ello. Con una sesión fotográfica sencilla de tus productos o servicios, podrás poner en bandeja lo que tu cliente quiere: rapidez, facilidad y compromiso. Los escaparates físicos ya han pasado a la historia de las grandes cadenas.
10.- Es una nueva forma de promoción: empieza ahora.
Internet nos ofrece una amplia gama de promociones de nuestra tienda online, y mucho más baratas que el tradicional “buzoneo” o marketing directo. Contar con un e-commerce nos permitirá realizar campañas de public
idad en Google, en redes sociales como Facebook o Instagram, y podrás segmentar a tu público objetivo de una manera mucho más eficiente.
En definitiva, crear una tienda online puede ser el paso de tu negocio a otra fase: la fase de encontrar nuevos clientes, y la que determine tu éxito en estos momentos.
En BID Soluciones, contamos con un amplio grupo de profesionales encargados de realizar e-commerce o tiendas online personalizadas para cada negocio, ¡ponte en contacto con nosotros y solicita presupuesto sin compromiso!
Nacho Figueroa
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